Primera ascensión: José Ángel Cano, Carlos Izquierdo y Javier Sáenz en el año 1985.
Material necesario: Cuerda doble o simple, 12 cintas, 2 cintas largas, friends del 0,5 al 2.
El Desfiladero de la Hermida se abre por el Sur formando el valle de Lebeña. Allí podemos encontrar una gran cantidad de paredes que dominan el valle desde lo alto.
El Agero es un pequeño paraíso de roca que cuenta con varios sectores bien diferenciados, todos con vías muy buenas sobre roca excelente.
Podremos encontrar clásicas rutas como «Osiris», «Mar de Sueños», «Antimateria», «Hiperespacio»….
Para escalar en el Agero debemos emplear a fondo los empotradores y los friends, incluso en las vías deportivas más cortas de los riscos vecinos, se ha equipado solo en donde no es posible colocar un seguro flotante. Esta filosofía hace que la escalada en el Agero mantenga ese sabor creativo y aventurero que le da el caracter que hoy en día conserva.
El Resquilón, un pequeño zócalo cóncavo de 100 metros de altura, se sitúa abajo a la derecha según miramos el Agero desde el valle. Constituye por sí solo un buen objetivo de escalada.
Las primeras vías en este sector son de principios de los 80 y se deben principalmente a escaladores cántabros como Juan Carlos Ojeda o Santiago González y algunos asturianos como Miguel Rodriguez y José Luis Rodriguez con la vía «Cosmos», por ejemplo.
Años después son los cántabros Javier Saez y Ángel Bengoechea (Los Cholos) quienes van abriendo todas las rutas.
La vía «Queroseno» es una de las más repetidas del sector. Atraviesa la parte central de la pared por una de las líneas más lógicas. Placas de canalizos típicos del Agero, lajas y un espectacular pero sencillo desplome final hacen de esta vía un clásico de la zona.
Aproximación: Aparcar el coche en el pueblo de Allende, hay un pequeño parking donde apenas caben 5 o 6 coches. Iniciaremos la marcha por una pista asfaltada. Veremos una flecha con la palabra «Agero» en una casa. Debemos continuar por la pista y coger el segundo gran desvío a la derecha. Una vez en este desvío, en una curva tendremos que girar a la derecha para adentrarnos en el bosque (hito).
A través del bosque seguiremos hasta una pedrera que nos depositará en la base de la pared (1 hora).
Largo 1, III (40 metros): Una gran placa tumbada de gotas de agua protegida con tan solo 3 bolts.
Largo 2, V+ (30 metros): Lajas y placas con un paso de adherencia nos llevan a un pequeño deplome. Nos montamos en él y continuamos por una bavaresa dónde es fácil autoprotegerse.
Largo 3, IV (30 metros): Este largo es más sencillo, escalaremos por un sistema de grandes fisuras y avanzaremos por una placa hasta alcanzar la reunión en un zócalo, una vez pasado el arbusto.
Largo 4, V (20 metros): Superamos el techo que tenemos justo en la reunión y avanzamos hasta el siguiente techo. Una vez superado este otro, debemos afrontar una placa con pasos de adherencia protegida por 2 bolts (se puede sortear por su derecha a través de una fisura herbosa). Reunión a los pies del último desplome.
Largo 5, V+ (30 metros): Escalamos el pequeño techo desplomado (bien protegido por un parabolt) y después por terreno más fácil (IV) alcanzamos la reunión en una encina.
Descenso: Tenemos dos opciones. Una, utilizar alguna de las líneas de rápel, lo más sencillo es utilizar los rapeles de la vía Caneco, siempre y cuando no encontremos a nadie escalando en la misma o en las proximidades. Si se opta por este descenso, debemos rodear un pequeño mogote rocoso situado a la izquierda de la salida de la vía Queroxeno. A través de un cable alcanzaremos la instalación de rappel. En dos rapeles (de 45 y 55 metros cada uno) alcanzamos el suelo (con cuerdas dobles de 60m).
La otra opción consiste en alcanzar la base del espolón del Cuetu Agero, donde se abre una canal descendiente cubierta con hojarasca en la que habrá que prestar cierta atención a los patinazos y pegarnos algo más abajo a la pared de nuestra derecha, donde encontraremos un cable, el cual seguiremos asegurados a él, destrepando esta parte de la pared hasta alcanzar el camino de entrada a las vías.
Después de esta actividad nos dimos un pequeño homenaje en el RESTAURANTE LA BARRICA en Potes.
Restaurante LA BARRICA:
Calle Dr. Encinas, 11
39570 Potes, Cantabria
602481840
http://www.restaurantelabarrica.com
Ensalada de aguacate y gambas, pulpo a la parrilla con helado de ali oli, solomillo…. Muy recomendable la comida, el trato del personal y las vistas y tranquilidad de la terraza.
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